La cámara Sharp-7 incorpora actuadores MEMS patentados y un sensor de 8 MP para ofrecer una imagen de alta calidad en todo el rango de temperatura operativa a bordo de los vehículos.
Sheba Microsystems, compañía especializada en tecnologías MEMS, anuncia el lanzamiento del modelo Sharp-7, una de las primeras cámaras con enfoque automático (autofocus) para el sector de la automoción. Se trata de la primera vez que Sheba proporciona una solución específica para la industria del automóvil, ya que incorpora un sensor de 8 MP de grado automoción con un controlador MEMS totalmente integrado.
Gracias a los actuadores MEMS patentados del fabricante, Sharp-7 dota de una consistencia sin precedentes, contribuyendo a beneficiarse de imágenes de alta calidad en el rango de temperatura encontrado en vehículos y mostrando el potencial de la adopción de un sensor de mayor resolución en cámaras de sistemas avanzados de asistencia al conductor (ADAS).
Reto
Las cámaras del sector de la automoción se enfrentan al desafío de mantener la calidad de imagen y la estabilidad del enfoque durante las variaciones de temperatura a medida que la óptica y las piezas de la cámara experimentan una expansión térmica.
Dado que el mercado de sensores para automóviles continúa la tendencia hacia modelos de mayor resolución, este problema es cada vez más pronunciado por el menor tamaño de píxel. Los píxeles de menores dimensiones requieren una alineación más precisa en la óptica para garantizar que la luz se enfoca de manera precisa en cada píxel.
Además, cualquier desalineación por expansión o contracción térmica puede provocar borrosidad o distorsión, lo que es problemático para cualquier cámara y especialmente en automóviles, debido al rango de temperatura extendido.
Tecnología incorporada
La tecnología propia de Sheba compensa esta expansión térmica al mover el sensor “ligero” a lo largo del eje óptico, en lugar de mover las lentes. El peso del sensor de imagen representa solo el 2-3 por ciento del peso de la lente óptica, lo que hace que sea más fácil de manejar, permitiendo un rendimiento de enfoque automático rápido y preciso, incluso cuando las temperaturas fluctúan. Este enfoque “desbloquea” las ventajas que los sensores de alta resolución pueden aportar a las cámaras de automóviles, como la detección de objetos (peatones, animales y señales de tráfico) y el zoom digital.
Sus actuadores electrostáticos están especialmente indicados a la hora de solventar problemas de expansión térmica, ya que aportan estabilidad y mantienen un rendimiento consistente, independientemente de cambios de temperatura en el rango de -40 a+150 °C. También son robustos, rápidos, precisos, eficientes y compactos. Por su parte, la tecnología MEMS de la compañía ha superado pruebas de caída, choque térmico, ciclo térmico, vibración y choque mecánico.
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