Alimentado a partir de una batería para ofrecer mayor flexibilidad, este sistema inalámbrico de detección de disparos puede convivir con equipos cableados en el mismo despliegue.
Shooter Detection Systems presenta en sociedad su nuevo sistema detector de disparos Guardian, dotado de conectividad inalámbrica.
Es un dispositivo que se alimenta a partir de una batería, la cual cosa supone una mejora respecto a los sistemas precedentes. Dicha batería alimenta un sensor dual de disparos que se enmarca en la línea Guardian Indoor Active Shooter Detection System.
Además del uso de la batería, que puede intervenir cuando no se dispone de una fuente de corriente principal, este dispositivo también puede alimentarse mediante un cable de red gracias a la capacidad PoE (Power over Ethernet). La instalación prescindiendo de cualquier tipo de cable también es posible.
Una vez realizada la identificación de un sonido que puede corresponder a un tiro, este sistema inalámbrico de detección de disparos es capaz de avisar tanto a los ocupantes del edificio, como a las autoridades policiales.
Para poder discernir el sonido que corresponde a un disparo del que no, este sistema examina mediante sensores las señales acústicas e infrarrojas. Para mantener un consumo idóneo que alargue la vida de su batería mientras los sensores no dejan de escanear su entorno, la tecnología de sensorización de alta seguridad que emplea ha sido optimizada, además para que también pueda filtrar falsas alarmas.
Funcionamiento del sistema de detección de disparos
El sistema no requiere de un proceso de calibración previo, siendo instalado en el sitio “tal cual”, y estando pensado para ofrecer servicio en infraestructuras sensibles en las que se hace difícil vigilar todos sus rincones simultáneamente y de una forma efectiva incluso disponiendo de una gran cantidad de personal, tales como estadios deportivos, bases militares, agencias gubernamentales, y también instituciones privadas.
La fabricante ha mantenido inalterado el backend de software, así como las integraciones, para poder incorporar una combinación de sensores PoE y otros inalámbricos en el mismo despliegue.
Además, los nuevos sensores también son compatibles con el tester de mano de la misma SDS, empleado en instalaciones y en las pruebas anuales sobre el terreno llevado a cabo como una capa adicional de cumplimiento.
Por ahora, el sistema inalámbrico de detección de disparos se encuentra en la fase final de testeo, tanto interno, como por terceras partes, para proseguir a continuación con las pruebas gubernamentales. SDS espera completar la fase de certificación a finales de este mismo año, y que el Guardian Wireless empiece a venderse a principios de 2020.
