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Soluciones avanzadas para la extinción de incendios

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Soluciones avanzadas para la extinción de incendiosArtículo escrito por Ian Kelsall, especialista de desarrollo de aplicación de 3M Electronic Materials Solution Division en el que desarrolla el concepto de las nuevas soluciones avanzadas para la extinción de incendios.

Según un informe de la NFPA, en 2016 hubo unos 37.000 incendios en zonas industriales y plantas de producción solo en Estados Unidos, con un resultado de dieciocho víctimas mortales, 279 heridos y mil millones de dólares en daños materiales. Las causas más comunes de estos fuegos fueron polvos combustibles, trabajo en caliente, líquidos / gases inflamables, equipos y maquinaria y riesgos eléctricos.

Ante estos datos, las organizaciones están invirtiendo en sistemas de detección y extinción de incendios, y en nuevas soluciones avanzadas para la extinción de incendios, cada vez más sofisticadas a la hora de proteger a trabajadores, líneas de producción y equipos y bienes valiosos.

El contexto de “misión crítica” también ha cambiado con el paso del tiempo, aunque todavía describe procesos que tienen impacto en las operaciones de negocio y la supervivencia, y los bienes a proteger son cada vez más digitales que físicos.

La penalización económica de un pequeño apagón hace que resulte esencial mantener la continuidad de las operaciones, tanto durante como después de una emergencia por incendio. Por ejemplo, en los centros de datos, el coste de un corte de suministro eléctrico se estima en 8.851 dólares (unos 7.626 euros) por minuto y subiendo.

Como muchas organizaciones siguen confiando en comercio electrónico (e-commerce) y digital (digital trading), un momento de inactividad, por muy corto que sea, puede tener graves consecuencias en términos de productividad, imagen de marca y ranking de optimización de buscadores (SEO). Así pues, si nuestra tienda online favorita no se encuentra disponible unos minutos, es posible que busquemos una alternativa y no volvamos más.

En el sector turístico, la capacidad de “mantener cosas en movimiento”, incluso en caso de incendio, es algo fundamental, en tanto que, en los centros de control de tráfico, el fuego y los apagones tienen un efecto inmediato en vuelos retrasados o cancelados y el consecuente reembolso económico a los pasajeros.

También hay un efecto en la pérdida de ingresos por los pasajeros de clase business, reducción en el gasto por turista en determinados destinos y mayor consumo de combustible por parte de las compañías aéreas, así como los beneficios para otras aerolíneas a las que acuden los viajeros.

Otras infraestructuras se ven afectadas de manera simular por el fuego. Donde el transporte está muy concentrado, por ejemplo, en redes de tren (cercanías), tranvía y metro, se produce una pérdida de confianza que se puede traducir en caída de ingresos. Por lo tanto, la restauración del servicio lo antes posible es un factor crítico.

La protección de bienes y servicios requiere maneras alternativas de salvaguardar ante el fuego. Los sistemas de aspersión de agua se han usado durante muchos años como una solución efectiva contra incendios estructurales; sin embargo, el agua puede afectar a servidores y salas de control, destruir equipos y, en consecuencia, interrumpir el servicio.

Antiguas soluciones para la extinción de incendios

Los sistemas de agua nebulizada, como una tecnología acuosa, descargan un espray fino (microgotas) y extinguen el incendio de un modo más limpio y menos perjudicial que un aspersor tradicional. No obstante, el agua en cualquier “formato” puede provocar cortocircuitos, daños irreparables y pérdida de datos.

Los sistemas antiincendios gaseosos se han empleado fundamentalmente en tareas de protección de proyectos de misión crítica desde hace tiempo y durante muchos años el halón ha sido el “estándar de oro”. Pero en 1994 se ordenó su retirada por el impacto en la “capa de ozono” y los hidrofluorocarbonos (HFC) comenzaron a ser utilizados como agentes extintores.

Sin embargo, los elevados valores Global Warming Potentials (GWP) de los HFC pusieron de manifiesto que tampoco era una solución sostenible. El Protocolo de Montreal – el mismo que prohibió los halones – ha ido ampliándose para abarcar sustancias con elevada GPW. La Enmienda de Kigali, ratificada en 2016, especifica los HFC que deben retirarse del mercado.

Nuevas soluciones avanzadas para la extinción de incendios

Soluciones avanzadas para la extinción de incendiosExisten dos grupos principales de agentes de extinción gaseosos que aportan una alternativa sostenible sin dañar la capa de ozono ni tener una alta GWP: sistemas de gas inerte basados en nitrógeno y argón y halocarbonos como el fluido de protección ante el fuego Novec 1230 de 3M. Las soluciones con gas inerte tienen un impacto neutro en el entorno, ya que usa fuentes naturales como medio de extinción. También es una alternativa ecológica sin impacto en la capa de ozono (Zero Ozone Depletion Potential) y GWP de menos de 1 (con sólo cinco días de permanencia en la atmósfera).

Los sistemas de gas inerte reducen la cantidad de oxígeno en la atmósfera hasta que las llamas desaparecen y el fuego se extingue. Esto requiere una gran cantidad de gas (alrededor del 40 por ciento del volumen de la habitación) en dos minutos. Para facilitar su utilización, es necesario crear áreas de almacenamiento para guardar grandes cantidades de gas a elevada presión (300 bar) y conductos de ventilación hacia espacios exteriores o un hueco aislado.

Los sistemas de halocarbonos como el fluido Novec 1230 proporcionan la misma protección limpia y sostenible del gas inerte. Este producto Novec se almacena en estado líquido y, por lo tanto, necesita mucho menos espacio (hasta un 80 por ciento que los gases), aportando un beneficio significativo en aplicaciones con restricciones de espacio o entornos marinos.

Estas soluciones avanzadas para la extinción de incendios de 3M también mantienen una baja presión (típica de 25 a 42 bar) y minimizan la necesidad de almacenamiento especializado. Como un sistema de halocarbonos, confía en la refrigeración para extinguir incendios incipientes.

Tanto los agentes inertes como los halocarbonos se deberían instalar como parte de un sistema de protección de incendio que supere los estándares internacionales más importantes como ISO, CEN y NFPA. Para los halocarbonos, estas aprobaciones garantizan la descarga y el alcance de la concentración de diseño en menos de 10 segundos, extinguiéndose en menos de 30 segundos.

Hay que recordar que el uso de un agente halocarbono que no haya sido sometidos a las pruebas pertinentes o de un sistema sin las aprobaciones de los OEM supone un riesgo para los trabajadores de instalaciones de misión crítica.

Las nuevas soluciones avanzadas para la extinción de incendios poseen el máximo margen de seguridad de todos los agentes para espacios ocupados que requieren el acceso de los profesionales. Esto es consecuencia de la baja concentración de diseño requerida para extinguir un fuego. La integridad de las personas debe ser la máxima prioridad en cualquier entorno.

El margen de seguridad es un aspecto primordial en, por ejemplo, aplicaciones marítimas, donde el escape de un área protegida supone un reto. El empleo de sistemas de dióxido de carbono, como sucedía hasta hace tiempo, se ha suspendido en zonas habitadas por la concentración requerido para apagar un fuego, que puede ser letal.

Así pues, las consecuencias de un incendio pueden ir más allá de la extinción de las llamas. Afortunadamente, existen soluciones avanzadas para la extinción de incendios, como Novec, que cumplen la totalidad parámetros, incluyendo velocidad de extinción, propiedades ambientales, limpieza y margen de seguridad para las personas.


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